Eduardo , de 30 años, huyó de El Salvador rumbo a Estados Unidos en julio de 2023. Pero el viaje fue largo y los cambios en la Casa Blanca, rápidos. Después de un mes y medio de travesía y cuatro meses en México, esperando que el Gobierno de EEUU le concediera una cita para presentar su solicitud de asilo, Donald Trump cerró la frontera en su primer día de vuelta al cargo. Eduardo, como miles de migrantes más, quedó varado en México , que de la noche a la mañana dejó de ser país de tránsito —ya no había a dónde transitar— para convertirse en destino forzoso . "Estuve esperando como los demás, como nos pedían, pero nunca alcanzó a llegar mi momento", explica a EL PERIÓDICO, desde Ciudad Juárez.
Para Eduardo, llegar a EEUU era una cuestión de vida o muerte. Como tantos otros salvad