Llorar suele asociarse con el dolor, la tristeza o la frustración. Sin embargo, en determinadas situaciones, las lágrimas aparecen en contextos completamente opuestos: cuando algo nos conmueve profundamente, logramos un objetivo muy esperado o recibimos una buena noticia. Este fenómeno, conocido como “lágrimas de alegría” , ha sido estudiado por la psicología para comprender por qué nuestro cuerpo reacciona de esa manera ante emociones positivas.
Los especialistas explican que este tipo de llanto se relaciona con picos de activación emocional . Cuando una persona experimenta un momento de felicidad extrema , el cerebro libera una combinación de hormonas como la dopamina y la oxitocina , asociadas con el placer, la recompensa y el apego. Esta liberación intensa puede generar u