La vuelta del debate sobre la " mili " ha llegado a Alemania. El Gobierno implanta un servicio militar voluntario con una cláusula clara: si no logra reunir 80.000 efectivos, podrá convertirse en obligatorio mediante la activación de la conscripción.
El plan busca mejorar la capacidad defensiva del país en un contexto marcado por la amenaza rusa, y abre la puerta a incorporar tanto a hombres como a mujeres mayores de 18 años.
Para atraer a nuevos reclutas, Berlín ofrece retribuciones de entre 2.000 y 2.300 euros mensuales . La idea es que el servicio resulte competitivo frente a otras opciones laborales y formativas, y que sirva para ensanchar reservas y unidades operativas.
La captación se articulará con campañas dirigidas a estudiantes y jóvenes trabajadores , con itinerar