La Selección Española sub-19 de fútbol sala inauguró su ciclo de amistosos de preparación para el Europeo de Moldavia con un exigente test frente al Viña Albali Valdepeñas. El encuentro, disputado en el pabellón Virgen de la Cabeza ante cerca de un millar de espectadores, se convirtió en una auténtica fiesta del fútbol sala, donde la intensidad competitiva se combinó con la emoción de un ambiente de gala.

El choque tenía varios alicientes. Para los pupilos de Albert Canillas, suponía el primer partido tras semanas de concentración, con la vista puesta en el campeonato continental que se celebrará del 28 de septiembre al 5 de octubre. Para los de Marlon Velasco, en cambio, significaba el último ensayo en casa de una pretemporada exigente que culminará en pocos días con el debut liguero en

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