La alcaldesa de Dosrius, Silvia Garrido , queda en una posición delicada frente a los vecinos de la urbanización Can Massuet. Es evidente que la edil no ha buscado que se produzca una tragedia como l a muerte de más de una veintena de gatos en apenas un mes, pero la deficiente señalización de la carretera que cruza la zona ha terminado generando un escenario doloroso y evitable.

A su favor, Garrido puede alegar que la seguridad vial en entornos de montaña es un problema complejo que no se resuelve de un día para otro y que requiere inversión municipal. Sin embargo, la falta de medidas preventivas básicas —desde la reducción de velocidad obligatoria con radares hasta la instalación de señales que adviertan de la presencia de colonias felinas— ha propiciado que la situación se vuelv

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