Durante el tercer set contra Luciano Darderi , un movimiento incómodo tras un derechazo hizo que Alcaraz se llevara la mano a la rodilla derecha. El público contuvo el aliento mientras el fisioterapeuta masajeaba la zona. "Solo sentí algo que no funcionaba bien, pero después de cinco o seis puntos, desapareció" , confesó el tenista, restándole importancia al incidente. Lo que siguió fue una exhibición: 31 tiros ganadores, apenas 12 errores no forzados y un marcador contundente de 6-2, 6-4, 6-0 .

El rival, un debutante como cabeza de serie en un major, no tuvo opciones. "Todos sabían que mis posibilidades no eran altas" , admitió Darderi, resignado ante la superioridad de Alcaraz, quien ahora suma 80 victorias en torneos de Grand Slam , uniéndose a leyendas como Becker, Borg

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