El Ejecutivo acaba de enviar al Congreso el proyecto de presupuesto 2026 por 257 562 millones de soles. Es la cifra más alta de nuestra historia y, en el papel, prioriza educación, salud, transporte y seguridad. Para los jóvenes de 18 años que empiezan a construir su futuro, este dinero debería traducirse en aulas modernas, hospitales equipados, calles seguras y empleo digno. Pero la gran pregunta es: ¿realmente lo veremos?
La experiencia nos enseña que no basta con destinar millones si no hay transparencia en la ejecución. Cada año se anuncian presupuestos ambiciosos, pero las regiones siguen con obras paralizadas, hospitales sin medicinas y colegios sin agua ni internet. La descentralización que promete el presupuesto 2026 solo funcionará si los gobiernos regionales y locales usan los r