Las divisiones internas sobre el reconocimiento del Estado palestino o la imposición de sanciones al Gobierno de Netanyahu se hacen patentes en Estados miembros como Bélgica, Finlandia, Suecia y Países Bajos
Las discrepancias sobre cómo presionar a Israel para que ponga fin a las atrocidades en la franja de Gaza , y en torno al reconocimiento o no del Estado palestino , no solo dividen a una Unión Europea hasta ahora incapaz de mostrar una voz firme unánime frente al Gobierno de Benjamín Netanyahu , como ha quedado en evidencia una vez más en la reunión informal de ministros de Exteriores celebrada el sábado en Copenhague. Las divisiones también han abierto una grieta en varios Gobiernos de coalición a lo largo y ancho de la Unión Europea. Entre los grandes países, solo en Alemani