La Procuraduría General de la Nación puso bajo la lupa a l a administración distrital de Cartagena, exigiendo explicaciones contundentes y acciones inmediatas frente a la alarmante situación del transporte público en la ciudad. El ente de control solicitó a la Alcaldía un informe detallado sobre las medidas adoptadas para contener la proliferación de vehículos de servicio público en condiciones deplorables y aquellos que operan al margen de la ley.

La Provincial de Instrucción de Cartagena, en un requerimiento formal, señaló una serie de deficiencias que afectan la prestación del servicio. Entre las irregularidades más preocupantes se destacan el constante so brecupo en los vehículo s, prácticas de conducción temeraria, la circulación de automotores con un deterioro estructural y m

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