La tradicional Tormenta de Santa Rosa, fenómeno climático que suele presentarse a fines de agosto en el Cono Sur, volvió a hacerse sentir en la Argentina con fuerza inusitada.
Este año, el temporal dejó inundaciones en Buenos Aires, evacuados en Mendoza y daños por granizo en al menos seis provincias, generando preocupación tanto en las autoridades como en especialistas en cambio climático.
En la provincia de Buenos Aires, especialmente en la zona norte, varias localidades amanecieron con calles anegadas y barrios inundados. El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) emitió alertas por lluvias que podrían superar los 100 mm acumulados, un volumen que en menos de 24 horas equivale a casi el promedio de precipitaciones de un mes.
La Ciudad de Buenos Aires también registró lluvias persistent