El cuerpo sin vida de Valeria Afanador fue encontrado el pasado viernes 29 de agosto en Cajicá, Cundinamarca, tras varios días de búsqueda. La niña de 10 años había desaparecido cerca de su colegio, donde se habían realizado múltiples rastreos sin éxito previo. Julián Quintana, abogado de la familia, indicó que la principal hipótesis de la investigación es homicidio. La unidad de vida de Cundinamarca se encarga del caso, y se espera que en los próximos días se determine la causa de muerte.

Quintana también destacó la responsabilidad del colegio en este trágico suceso. Afirmó que hay indicios de que una tercera persona pudo haber estado involucrada en la desaparición de Valeria. "El hallazgo no descarta lo que hemos denunciado desde los primeros días, que es la responsabilidad del colegio y que una tercera persona la haya sustraído del plantel", declaró. El abogado subrayó que la rectora y el personal del colegio deben asumir la responsabilidad por el descuido en la vigilancia de la menor.

En un video reciente, la rectora del colegio, Sonia Ochoa, mencionó a un extrabajador como posible sospechoso en la desaparición de Valeria. Ochoa afirmó que este individuo actuó con la intención de perjudicar a la institución. Quintana criticó que esta información no se hubiera compartido antes con las autoridades y solicitó a la Fiscalía una investigación exhaustiva sobre las declaraciones de la rectora.

La alcaldesa de Cajicá, Fabiola Jácome, confirmó que el cuerpo fue hallado en un área de fácil acceso, lo que ha generado dudas sobre las circunstancias de su desaparición. El cadáver fue trasladado al Instituto Nacional de Medicina Legal para realizar exámenes que ayuden a esclarecer la causa y cronología de la muerte. La familia de Valeria no pudo acceder al cuerpo y espera respuestas sobre lo sucedido.