A unos días del hermoso espectáculo deportivo, el Campeonato Mundial de Atletismo Tokio 2025, con la presencia de los principales astros de la velocidad, la resistencia, el salto, los lanzamientos, reunión agonal del 13 al 21 de septiembre, con más de 2,000 atletas de unos 200 países, un hilo sutil del tiempo conecta en el recuerdo algunos acontecimientos de los Juegos Olímpicos de 1968 con Japón, cuya capital organiza por segunda ocasión el Mundial, Tokio 1991 y el país por tercera vez con Osaka 2007.
La organización obedece al deseo de ser el centro mundial de atracción, conjunción atractiva de la evolución de los récords con la nueva época de la tecnología de las aladas zapatillas —con diversas interpretaciones, algunas contrarias a esta modernidad que con sus mecanismos de empuje en c