Junto a la canadiense Leylah Fernández , la estadounidense cayó ante la dupla favorita, Taylor Townsend y Katerina Siniakova , en un partido que duró apenas 56 minutos.
"Fue un honor compartir la cancha con una leyenda como Venus" , confesó Townsend después del encuentro, mientras el público se mantenía de pie aplaudiendo a Williams. La escena no fue solo un reconocimiento a su carrera, sino también a su resistencia: 16 meses fuera de las canchas y un regreso que demostró que el tenis sigue corriendo por sus venas.
La estadística fue contundente: 6-1, 6-2 . Sin embargo, más allá del marcador, lo que resonó fueron las palabras de Williams en conferencia de prensa: "No intenté jugar a lo seguro. Fui por ello, como siempre" . La exnúmero uno del mundo, dueña de 14 títulos de