
La Policía de Houston (Texas, EE.UU.) detuvo este miércoles al hombre acusado de matar a tiros a un niño de 11 años la noche del pasado sábado, después de que el menor le jugara una broma.
La víctima, identificada como Julián Guzmán, jugaba con su primo de 10 años a tocar los timbres de las casas y correr. Según las autoridades, los niños tocaron tres veces al domicilio del atacante, Gonzalo León (42 años), en un lapso de 15 minutos.
De acuerdo con la investigación, León esperaba " en las sombras de su patio lateral, detrás de una cerca", mientras los pequeños jugaban. Cuando los primos tocaron el timbre por tercera vez, el hombre salió tras ellos armado y disparó al menor en la espalda .
En el video grabado con el teléfono móvil de Guzmán se escuchan disparos y jadeos. A pesar de recibir atención médica, el niño falleció al día siguiente. El primo declaró que no supo cómo reaccionar ante lo que hasta entonces había visto " solo en películas ", por lo que se limitó a tratar de recoger el cuerpo.
El asesino, un exmilitar , tenía en su casa el arma homicida junto con otras 20, además de granadas tácticas y de humo. Fue localizado por la Policía en un hotel junto a su esposa y su hijo de 2 años, después de que abandonaran su vivienda al verse rodeados por los medios de comunicación.