El tifón Peipah causó una estela de destrucción en el centro de Japón , provocando al menos 23 personas heridas durante su paso. El fenómeno meteorológico impactó la región central del país, desplazándose por la costa del Pacífico con vientos extraordinariamente potentes que generaron significativos destrozos estructurales .
La prefectura de Shizuoka resultó particularmente afectada, con daños en aproximadamente 40 viviendas y cortes eléctricos que dejaron sin suministro a 17.000 hogares , evidenciando la magnitud del evento natural.
En la ciudad de Makinohara se registraron los efectos más críticos. Tres personas resultaron gravemente heridas y otras 20 resultaron heridas leves , principalmente por roturas de vidrios y caída de escombros , tal y como informó la