El Zócalo capitalino, ese viejo gigante de piedra y memoria, se encendió en un rugido colectivo la noche del sábado. Residente , con su verbo afilado y su corazón siempre en el puño de la justicia, reunió a unas 180 mil almas para convertir la explanada en una fiesta de rap, resistencia y humanidad.
Raperas en llamas: Una antesala fememnina y poderosa
Antes del arribo del puertorriqueño, sonó la furia en femenino. El colectivo Mujer en Cypher , conformado por Arianna Puello, Ximbo, Niña Dioz, Prania Esponda, Azuky y Mena, levantó la atmósfera con rimas afiladas y convicción. Sus versos fueron dagas contra el silencio, una voladora a la desigualdad, un ritual de voz y palabra.
Al filo de las 20:00 horas, Residente emergió como un volcán. Con “Baile de los pobres” encendió al públic