RECUERDO mucho una especie de adagio chino (digo especie porque por su extensión no podría considerarse como tal) que, refería a un sujeto tan fuerte como bravucón que sostenía que con el poder de su fuerza podría destruir lo que fuera, que pusieran a prueba la grandeza de éste para demostrarlo; un viejo sabio al escucharlo le decía: -si eres tan poderoso rompe la rama más alta de ese árbol. Al reto, raudo actúo el jactancioso fortachón; rápido y hábilmente trepó por el árbol y pronto, su reto (la rama) yacía en el suelo.

-Qué más quieres que haga para demostrarte mi poder – retó al sabio. Éste le dijo; –si eres tan poderoso, ahora une nuevamente la rama que has arrancado al árbol y que quede tan intacta como estaba antes de su destrucción.

–Pero eso es imposible – farfulló el bravucón.

See Full Page