YUSTO / GINER presenta, en su espacio de Madrid, What was I made for, una exposición individual de la artista Line Finderup
La artista danesa Line Finderup retoma un ícono familiar de los años noventa —el Tamagotchi— para cuestionar qué significa vivir, sentir y cuidar dentro de entornos controlados.
Line Finderup
Para muchos, los Tamagotchis fueron más que juguetes: fueron nuestra primera experiencia de cuidar una vida digital. Estas criaturas pixeladas exigían sus necesidades a través de pitidos y parpadeos. Representaron un avance en la evolución humana al inspirar, por primera vez, empatía y devoción hacia una vida no orgánica. Requerían atención, consuelo, juego, comida… aunque sus mundos estaban rígidamente guionados, confinados a reglas estrictas y rutinas programadas. Eran, al