LA HABANA (AP) — Un apagón masivo que afectó al oriente de Cuba y dejó a varias provincias sin luz fue revertido en la madrugada del lunes, informaron las autoridades del sector.
El corte se produjo a partir de un colapso en una línea de 220 kilovoltios, explicó en la red social X el Ministerio de Energía y Minas (MINEM), lo que ocasionó una interrupción del servicio “desde la provincia de Las Tunas hasta Guantánamo”, en el extremo este de la isla.
Este corte regional – el primero en su alcance desde una interrupción nacional en marzo — se produjo en el contexto de una severa crisis energética que en los últimos cuatro años tensionó la vida cotidiana de los cubanos que diariamente sufren un cronograma de suspensiones por zonas.
El portal oficial Cubadebate, citando al director de Electricidad del MINEM, Lázaro Guerra, indicó que la desconexión se produjo por “condiciones meteorológicas” adversas en la zona de Las Tunas y en momentos en que de por sí “la generación... al momento de la avería era muy baja”.
A lo largo de la noche del domingo y la madrugada del lunes los directivos fueron informando de la recuperación zona por zona. En la mañana indicaron que se entregaba electricidad a Camagüey, Holguín y sobre todo a Santiago de Cuba, adonde se ubica la segunda ciudad del país; así como a Guantánamo, la provincia más oriental de la isla.
Por su parte, la distribuidora de energía Unión Eléctrica dio a conocer que en la mañana la isla tendría una demanda de 2.795 megavatios de los cuales podría satisfacer unos 1.700, el 60% de la demanda.
En la tarde se espera una demanda de 3.450 megavatios y una afectación de 1.610, por lo que la isla tendrá un déficit de más del 46%, una cantidad que se ubica en el promedio de esta temporada en la cual el calor excesivo eleva los requerimientos de luz.
Los cortes de electricidad y su racionamiento diario que se van alternando cada día —semanalmente se da a conocer un cronograma— forman parte de la crisis económica ocasionada por las sanciones de Estados Unidos y las consecuencias de la pandemia que no pudieron ser superadas, sobre todo la caída del estratégico sector del turismo.
El Estado tiene dificultades financieras para adquirir repuestos y dar mantenimiento a sus obsoletas centrales por lo que cualquier factor las deja fuera de servicio por días.
Las autoridades desplegaron un programa de decenas de pequeños parques solares en cada provincia para contener la demanda.