Transcurrieron veinte días desde que el fiscal federal Franco Picardi comenzó a investigar presuntos hechos de corrupción a través de un presunto circuito de sobornos que puso bajo la lupa a la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS) y a la droguería Suizo Argentina, de los hermanos Emmanuel y Jonathan Kovalivke r. En las antípodas del ex titular de la ANDIS, Diego Spagnuolo -que permanece recluido-, los empresarios buscan retomar “la vida normal, sin nada que esconder”.
Los primeros días fueron convulsionados: Jonathan se presentó en Comodoro Py tres días después de los allanamientos en su casa, y entregó su celular, apagado y sin contraseña.
Días después, su padre Eduardo hizo lo mismo: se presentó ante el fiscal federal Picardi y dejó su celular.
Pero previo a ello, Jonathan h