Mucha tensión ayer en Ponferrada porque los bercianos les exigieron a sus políticos que fuesen de verdad empáticos con lo que ha pasado este verano en sus montes. Protegidos por la policía, representantes locales, comarcales, provinciales, autonómicos y nacionales de todos los partidos dicen que sí sí, que desde luego, pero luego se desploma una señora a su lado (y eso que ayer no era día de calor) y lo que les sale es comentar la jugada sin acercarse a ayudarla. Exactamente así como si no hubiesen entendido nada.

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