CNN Español —
Jair Bolsonaro se convirtió este jueves en el primer expresidente de Brasil en ser condenado y sentenciado por un intento de golpe de Estado, un momento y una decisión altamente simbólicos en un país en el que los responsables de las interrupciones a la democracia y de las dictaduras nunca fueron juzgados por sus actos.
Si Bolsonaro mostró al país la tobillera que debió usar en las últimas semanas, su imagen en una prisión amenaza con tener un alto efecto político para seguidores y detractores. Pero también para las instituciones de Brasil, por lo que representa la sentencia decidida por el panel de cinco miembros del Supremo Tribunal Federal. Es un impacto doble y, a la vez, contradictorio.
“Desde el punto de vista de la democracia, creo que es positivo” que Bolsonaro s