Incheon, Corea del Sur — Más de 300 trabajadores surcoreanos detenidos durante una redada de inmigración en fábrica de Hyundai en Georgia regresaron a su país en un avión chárter el viernes para reunirse con sus seres queridos.
Los trabajadores que viajaron a Corea del Sur estaban entre las aproximadamente 475 personas detenidas durante la redada de inmigración del 4 de septiembre en una fábrica de baterías en construcción en el campus de la extensa planta automotriz de Hyundai al oeste de Savannah, Georgia.
Su detención y la difusión por parte de Estados Unidos de un video que muestra a algunos trabajadores coreanos encadenados de manos, tobillos y cintura han causado indignación pública y un sentimiento de traición en Corea del Sur, un aliado clave de Estados Unidos. Últimas notici