Ni las universidades, ni la salud pública, ni la ciencia o la investigación están entre las prioridades de la política económica del gobierno nacional. Lo anterior quedó en evidencia en datos concretos: lo que la gestión libertaria lleva gastado en la intervención del dólar futuro para intentar contener el tipo de cambio es 45% superior a lo que destinó a ciencia y tecnología en el año.
De esta manera, un relevamiento privado mostró que los costos de sostener el esquema actual recaen -en gran medida- sobre la investigación y la ciencia nacional y amenazan con agravarse, en línea con la decisión del Ejecutivo de “no mover un milímetro ” lo hecho hasta ahora. Así, mientras la inversión estatal en el principal organismo de ciencia del país, el CONICET, alcanzó los 331,4 mil millones de