La publicidad vive una transformación sin precedentes. En apenas una década, la inversión global pasó de los formatos tradicionales —televisión, radio, prensa— a los entornos digitales, donde cada impresión se mide en tiempo real y cada clic puede convertirse en una venta. El auge del comercio electrónico, el crecimiento acelerado de las redes sociales y la capacidad de segmentar audiencias con gran precisión han cambiado las reglas del juego para empresas de todos los tamaños.
Las cifras lo confirman: el gasto mundial en publicidad digital alcanzará US$ 777.000 millones en 2025, concentrando más del 75 % del total publicitario, según Statista. En América Latina, este segmento ya absorbe el 56,6 % de la inversión y podría superar los dos tercios para 2029, de acuerdo con IAB LatAm y eMark