Renato Ortuño no entendió del todo lo que significaba estar vivo hasta que salió del hospital. Habían pasado semanas desde el ataque. Una bala le atravesó la vértebra a la altura del cuello, le apagó el cuerpo de los hombros hacia abajo y le dejó una sola certeza: nunca volvería a caminar. Tampoco podía mover los brazos. Aquel 23 de junio de 2023 se quedó atrapado dentro de su propio cuerpo. Este viernes se ha sometido a la eutanasia y se ha convertido en la segunda persona en la historia de Ecuador de hacerlo de forma legal.
Por Carolina Mella | EL PAÍS
Ecuador vivía hace dos años una de las peores crisis de violencia de su historia: 21 personas asesinadas cada día. Renato estuvo a punto de formar parte de esa lista cuando unos asesinos comenzaron a seguirle por error, creyendo que se t