Se cerró el ciclo zangozarra en lo referente a festejos de lidia y muerte con una novillada de la que salió triunfante por la puerta grande Antolín Jiménez . El menudo chaval jienense cortó las dos orejas del cuarto utrero de Albarreal que cerraba función y serial. Pudo hacerlo también Javier Illanguas , pero malogró dos entonadas puestas en escena con mal uso de los aceros de muerte, en especial el verduguillo.
Javier Yllanguas, citando al natural al primero de la tarde. Fotos: M. Sagüés
El encierro estaba previsto y anunciado en los carteles que sería matado en solitario por Bruno Martínez. Sin embargo, el pamplonés, tras su desafortunado paso por Peralta el pasado jueves, decidió poner punto final a su trayectoria profesional. Illanguas y Jiménez cubrieron de modo satisfactorio la