Madrid/París, 15 sep (EFE).- El segundo intento de Kylian Mbappé de blanco. Con Xabi Alonso en el banquillo y cambios visibles en un Real Madrid que cerró un ciclo repleto de éxito con Carlo Ancelotti. El techo de los cuartos de final, inferior al Arsenal en la eliminatoria, marcó el final. La decimosexta es el gran anhelo de un futbolista que ha recuperado todo su poderío. El Olympique de Marsella el primer paso.
El reto de Xabi Alonso es devolver el poderío del Real Madrid en Europa. Campeón de dos de las cuatro últimas ediciones pero incapaz de estar a la altura cuando incorporó al jugador más deseado, Mbappé. Llegó a un equipo con el síndrome de la ‘barriga llena’, con defectos de equilibrio y solidaridad en el esfuerzo que, lejos de corregirse, se agravaron.
Ya es pasado con la mano