El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha alertado sobre una inminente "agresión militar" por parte de Estados Unidos. En declaraciones a los medios, Maduro afirmó que su país ejerce su "legítimo derecho a la defensa" ante lo que considera una amenaza. "Hay una agresión militar en curso y Venezuela tiene derecho, según el derecho internacional, a responder", declaró este lunes.
La tensión entre Washington y Caracas se intensificó tras un ataque estadounidense el 2 de septiembre, donde se alegó que una embarcación cargada de drogas, supuestamente proveniente de Venezuela, fue atacada. Maduro enfatizó que Venezuela está en su derecho de defenderse y describió la situación como una "agresión en toda la línea", que incluye agresiones judiciales, políticas, diplomáticas y militares.
Estados Unidos mantiene actualmente ocho barcos militares y un submarino nuclear cerca de las costas venezolanas, argumentando que su presencia es para combatir el narcotráfico. Maduro exigió al presidente Trump que investigue el ataque, que resultó en la muerte de 11 personas. "El primero que tiene que investigar es el propio presidente de Estados Unidos", afirmó.
La escalada de tensiones continuó cuando el Departamento de Defensa de EE.UU. denunció que dos cazas venezolanos sobrevolaron el destructor USS Jason Dunham en aguas internacionales del Caribe. Trump advirtió que si los aviones representaban un peligro para las fuerzas estadounidenses, serían derribados. Maduro respondió que eso llevaría a "una etapa de lucha armada".
El pasado sábado, Venezuela acusó a un destructor estadounidense de abordar de manera "ilegal" una embarcación venezolana con nueve pescadores, quienes, según Caracas, se encontraban en aguas del país. Maduro calificó el abordaje como un "bochorno" y un "secuestro" por parte de un "grupo de 18 marines estadounidenses fuertemente armados". Se cuestionó quién dio la orden para tal acción, sugiriendo que tenía la intención de justificar "una escalada bélica" en la región del Caribe.