CIUDAD DE MÉXICO (AP) — A catorce subió el lunes la cifra de fallecidos por la explosión de un camión cisterna que transportaba gas en la Ciudad de México, mientras una treintena de personas permanecen internadas en varios hospitales capitalinos.

La Secretaría de Salud de la ciudad anunció en su cuenta de X la muerte de un hombre de 40 años que resultó lesionado en el accidente del 10 de septiembre.

Hasta la fecha doce hombres y dos mujeres han fallecido como consecuencia de la explosión del camión, cuya onda expansiva alcanzó a una treintena de vehículos que transitaban por una autopista que comunica la Ciudad de México con Puebla, a la altura del municipio más poblado de la capital, Iztapalapa.

Las autoridades indicaron que 39 personas, entre ellas cuatro niños, aún permanecen hospitalizados en varios centros de salud capitalinos, y otras 30 fueron dadas de alta.

La Fiscalía de la Ciudad de México continua con las investigaciones del accidente para determinar que causó el vuelco del camión de gas de la empresa privada Transportadora Silza que desató una gran explosión y un incendio.

Los peritos determinaron la semana pasada que el tanque de gas del camión “presentó ruptura en un casquete tras el choque con un objeto sólido, lo que permitió la fuga del gas y su ignición”, señaló un informe de la Fiscalía.

Entre las líneas de investigación que maneja el Ministerio Público está que el conductor incurrió en exceso de velocidad y no tenía capacidad técnica suficiente, lo que provocó que volcara.

El mortal accidente atrajo nuevamente la atención sobre los miles de camiones que recorren México diariamente transportando gas licuado de petróleo, del que dependen la mayoría de los hogares y negocios para cocinar y calentar agua.

La presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, dijo la semana pasada que próximamente se definirán nuevas normas de seguridad para el transporte de combustible, en particular para el traslado del gas.

La Fiscalía del Estado de México anunció el lunes que fue detenido e ingresado a una cárcel estatal el conductor de un autobús que chocó con un ferrocarril de carga el 8 de septiembre en el municipio central de Atlacomulco. En la colisión murieron 10 personas y 62 resultaron lesionadas.

De acuerdo con las investigaciones de la Fiscalía estatal, el conductor del autobús, Gustavo Alfredo “N”, decidió atravesar la línea del ferrocarril cuando se aproximaba la locomotora “presuntamente sin percatarse de ello, por lo que invade su paso y ocasiona el siniestro”. Según los testigos, el chofer “llevaba la música muy alta” lo que posiblemente impidió que escuchara el claxon de la locomotora, indicó la Fiscalía en un comunicado.

Por otra parte, la Fiscalía del estado sureño de Yucatán informó el lunes que avanza en las investigaciones sobre el choque entre un tráiler de una empresa cervecera, un transporte público y un vehículo ocurrido el 13 de septiembre en la carretera que comunica la ciudad de Mérida con el estado de Campeche que causó la muerte de 16 personas.

Las autoridades estatales ya entregaron los cuerpos de once de los fallecidos y faltan otros cinco por identificar.