MADRID. – La 79ª edición de La Vuelta a España , uno de los tres Grand Tours del ciclismo mundial, culminó de una manera sin precedentes: sin una última etapa, sin vuelta al circuito madrileño y posponiendo la ceremonia oficial de podio.
Lo que debería haber sido una fiesta del ciclismo se vio truncada por la irrupción masiva de manifestantes en el recorrido, protestando contra Israel y la presencia del equipo Israel Premier Tech en la competición, un episodio que ha desatado una grave crisis diplomática y ha puesto en jaque la capacidad de España para albergar eventos deportivos de primer nivel.
HISTÓRICO: Manifestantes detuvieron la Vuelta a España tras bloquear la carretera principal en el centro de Madrid en protesta por la participación de Israel en el evento. pic.twitter