Sebastián Caballa cursaba la carrera de Ingeniería Mecatrónica en la Pontificia Universidad Católica del Perú y se le asignó crear un proyecto de investigación que presentara un enfoque de responsabilidad social. Lo que suponía ser un trabajo universitario más resultó en la invención de un robot que actualmente colabora en los cuidados de niños hospitalizados. Así, nació Ropi , un producto 100% peruano que no solo ha ganado diferentes reconocimientos, sino también la sonrisa de los pacientes por su encantador diseño y función.
Los increíbles resultados se pueden observar en el Instituto Nacional de Salud del Niño , ubicado en el distrito limeño de San Borja . Así, atiende a decenas de infantes en la actualidad, pero busca incorporar nuevas habilidades para comunicarse de manera má