Una reunión privada y de alto nivel realizada en el famoso salón de protocolo del piso 7 del Departamento de Estado de Estados Unidos habría influido para que la descertificación a Colombia, medida que ya había tomado ese gobierno y que fue anunciada este lunes, no fuera tan estricta y dura como lo hubiese podido ser.
Incluir al país entre las naciones que no están cumpliendo con sus objetivos para erradicar el flagelo de la producción y tráfico internacional de narcóticos que Washington les envía para intensificar su lucha contra las bandas dedicadas a este delito.
Sin embargo, esto no ocurrió con Colombia. ¿Por qué? El pasado martes 9 de septiembre, la importante sala del séptimo nivel de la residencia presidencial, a donde no ingresa cualquiera, habría recibido con todos los honore