No volverá a nacer un hombre capaz de lavarnos el pelo con la única complicidad de un recipiente metálico en mitad de la inmensidad de la sabana africana destilando ese domesticado amor a través del gesto, ni de estafarnos con el timo de la estampita en mitad de un vagón de tren repleto de mafiosos mientras nos guiña el ojo para convencernos de lo contrario, ni de pasear descalzo por el parque del barrio neoyorquino de Greenwich Village, ni de disputarse el destino con otro pistolero incapaz de superarle en belleza pero radicalmente apto para igualársela. Según ha publicado el periódico , recogiendo un comunicado de la agencia de su representante, Cindi Berger, ha fallecido este martes mientras dormía sin especificarse por el momento la causa concreta de la defunción.
Redford había anunc