No es la primera vez que el presidente del Gobierno es víctima de su premura. anunció hace más de una semana que su gabinete aprobaría con «urgencia» un decreto que consolidará jurídicamente el embargo de armas a Israel.
La norma establecerá la prohibición legal y permanente de comprar y vender armamento, munición y equipamiento militar a Tel Aviv. El anuncio del presidente, en una comparecencia en Moncloa, fue una improvisación.
En plata: un ejemplo más de cómo los ritmos de la estrategia política del líder socialista y los golpes de efecto que busca para movilizar a la izquierda no son los del BOE, mucho más lento y problemático. Fuentes gubernamentales admiten a LA RAZÓN que el Gobierno, ante un decreto «complejo técnicamente», planteará «excepciones».
Aunque estas mismas fuentes ase