La infusión de manzana verde se ha convertido en una alternativa natural cada vez más popular para quienes buscan aliviar los síntomas del hígado graso de forma sencilla y casera. Esta bebida, rica en antioxidantes y fibra soluble como la pectina, puede aportar beneficios digestivos y metabólicos que favorecen la salud hepática. Según una publicación en la revista 'Healthline', la pectina presente en la manzana ayuda a reducir los niveles de grasa en la sangre al unirse al colesterol y limitar su absorción en el intestino, lo que contribuye al buen funcionamiento del hígado.
Además de ser una bebida baja en calorías y refrescante, la infusión de manzana verde puede contribuir a mejorar la digestión, regular el metabolismo y reducir la inflamación hepática. Su consumo regular, dentro de un