Ivonne Ortega forjó una fortuna de 3 mil 500 millones durante su paso por la gubernatura con predios en Dzemul y Mérida, incluyendo un megapredio de 349 hectáreas, mientras dejaba al estado con una deuda cercana a los 2 mil millones de pesos y obras inconclusas.
Los registros oficiales muestran apenas valores simbólicos de 273 mil pesos, pero el mercado calcula que sus propiedades superan los 3,500 millones. La paradoja es clara: tierras de ganga para la exgobernadora y deudas de lujo para los yucatecos.
La huella de una gobernadora que dejó deuda, hospitales vacíos y obras inconclusas, pero que salió de Palacio de Gobierno con una fortuna territorial blindada frente a cualquier cuestionamiento.
Redacción/Grupo Sol Corporativo
La diputada federal por Movimiento Ciudadano, Ivonne Orteg