Pocas cosas generan tanta frustración como descubrir que no puedes acceder a un préstamo, contratar una tarjeta de crédito o incluso una línea de telefonía porque figuras en un fichero de morosos. En España, el más conocido es ASNEF, pero existen otros como Badexcug o el Registro de Aceptaciones Impagadas (RAI). Su mera existencia tiene un impacto directo en la vida financiera de particulares, autónomos y pequeñas empresas.
En 2025, miles de personas tratan de encontrar una salida a esta situación. Y aunque la Ley de la Segunda Oportunidad sigue siendo una vía fundamental, no es la única. Conviene recordar que esta legislación no está pensada para todos: exige insolvencia probada, no puede usarse de forma reiterada en plazos cortos y conlleva un proceso judicial que puede durar meses. P