Al despedir a Robert Redford, fallecido hoy a los 89 años de edad, no es exagerado decir que fue uno de los actores que marcaron la historia del cine. No solo por ese físico que le granjeó una legión de fans, ni tampoco por ese talento al que la Academia de Hollywood siempre hizo oídos sordos, sino también por su capacidad para estar en el momento adecuado en el lugar correcto.
Egocéntrico, ambicioso y esquivo (salvo cuando tocaba exponer sus opiniones políticas), el actor y cineasta de Santa Mónica no formó parte del 'Nuevo Hollywood' de los 70, pero tampoco le hizo falta. Durante muchos años, sus películas representaron lo mejor que el Hollywood 'mainstream' podía ofrecer. E incluso cuando esa racha terminó, siguió estrenando ocasionalmente películas que valían la pena.
Para recordarlo