La Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec) de Venezuela denunció ayer martes un “nuevo ataque terrorista» contra dos de las principales líneas de transmisión de 765 kV (kilovoltio), el segundo de este tipo en menos de una semana.
En un comunicado, la empresa dijo que se trata de una “agresión extremista” contra una “infraestructura de vital importancia para el flujo de la energía eléctrica en el paí”.
Este ataque forma parte de “una estrategia fascista destinada a desestabilizar la paz y la unión nacional que prevalecerá ante las amenazas externas”.
“Estos ataques constituyen una manifestación de la guerra eléctrica, promovida por grupos que operan al servicio de intereses oscuros y agendas desestabilizadoras. Su objetivo es claro: quebrantar la armonía nacional, en un escenario en