Nos hacen ver que ya se está haciendo costumbre que la presidenta nacional de Morena, Luisa María Alcalde tenga que salir a tratar de apagar los fuegos que surgen por escándalos de sus correligionarios. Nos recuerdan que, primero, salió a defender a Andy López Beltrán con su viaje a Tokio, Japón y dijo que la austeridad no prohíbe viajar a otros países, pero tuvo que pedir que los dirigentes den ejemplo con sus acciones.
Luego, tuvo un choque con el coordinador de los senadores del PAN, Ricardo Anaya , que recriminó los presuntos vínculos de Morena con el crimen por el caso de Hernán Bermúdez , quien ha sido señalado de encabezar la organización criminal “La Barredora” al mismo tiempo que era secretario de seguridad pública de Tabasco, durante el gobierno del hoy senador Adán Aug