La ofensiva explotó con una combinación de potencia y estrategia que dejó claro que este equipo llegó para quedarse en la contienda.
En el corazón de la explosión ofensiva estuvo Ian Happ , quien no solo conectó su vigésimo tercer cuadrangular de la temporada , sino que terminó la noche con tres carreras impulsadas. Su batazo de dos carreras ante la curva del lanzador cubano Johan Oviedo fue el detonante que obligó a los Piratas a realizar una visita temprana al montículo. "Sabíamos que teníamos que salir con todo desde el principio" , comentaría después el jardinero.
Pero Happ no estuvo solo. El venezolano Moisés Ballesteros sorprendió al conectar el siguiente lanzamiento por encima de la pared del jardín derecho, marcando apenas su segundo jonrón en Grandes Ligas . Mientras