El reto del polen otoñal en Texas

El otoño en Texas trae consigo cielos despejados, temperaturas más frescas y festividades al aire libre. Sin embargo, para millones de texanos también significa el inicio de una temporada difícil: la de las alergias.

La principal responsable es la ambrosía (ragweed), una maleza que libera miles de granos de polen microscópicos capaces de desplazarse cientos de kilómetros con el viento. A esto se suman otras plantas como la artemisa y ciertos pastos, que contribuyen a la llamada “fiebre del heno”.

El clima cálido y la diversidad de flora del estado hacen que los niveles de polen permanezcan altos por más tiempo que en otras regiones del país. Así, los síntomas comienzan a finales de agosto y suelen extenderse hasta noviembre. Entre los más comunes están

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