Son muchos los electrodomésticos que se utilizan a diario y que contienen oro de 22 quilates en sus componentes, un metal crucial para su funcionamiento. El problema radica en que, al desechar estos aparatos, también se pierde este oro que podría ser reutilizado .

Para abordar esta situación, un equipo de investigadores del ETH Zurich desarrolló un proceso innovador que podría transformar la recuperación de metales preciosos de dispositivos electrónicos en desuso.

Este método permite extraer oro utilizando sustancias de la industria alimentaria , lo que representa una solución sostenible y rentable. La técnica no solo reduce el impacto ambiental, sino que también utiliza materiales reciclables para obtener metales valiosos sin recurrir a procesos químicos agresivos.

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