Publicado por Redacción León
Creado: 18.09.2025 | 16:45
Actualizado: 18.09.2025 | 17:02
Desde los lejanos tiempos del rey Mauregato, los reyes cristianos cumplían puntualmente con el infame tributo de las cien doncellas, que debían ser entregadas a los califas musulmanes a cambio de no sufrir sus ataques. De este centenar de desdichadas, León aportaba una parte procedentes de las parroquias de San Marcelo, San Martín, Santa Ana y Santa María del Mercado.
La leyenda tiene su inicio en el brutal acto de valor que realizaron las doncellas que iban a ser entregadas por el rey Ramiro I, que prefirieron cortarse una mano a dejarse llevar por su destino. Ante esta demostración de arrojo, el rey decidió negar para siempre el tributo y presentó batalla ante las tropas de Abderramán II