Por una caída real interanual del gasto superior a la baja de ingresos, el sector público nacional registró en agosto un superávit primario de $1,5 billones (0,2% del PBI) . Dado que el pago de intereses de deuda pública (sin contar compromisos con el sector público) fue de $ 1,16 billones, el resultado financiero fue superavitario en $ 390.000 millones (0,1% del PBI).
En otras palabras, las cuentas públicas arrojaron un excedente después de detraer los gastos de la recaudación (superávit primario) y un signo también positivo después de detraer los intereses de la deuda del resultado primario (superávit financiero).
De esa manera, el sector público acumuló al octavo mes consecutivo un superávit primario de aproximadamente 1,3% del PBI y un superávit financiero de aproximadamente 0,