Marcus Rashford necesitaba una noche así. Pitado durante todo el partido en St. James’ Park, el delantero inglés respondió con grandeza: dos golazos, un cabezazo y un misil a la escuadra , para estrenar su cuenta como jugador del Barcelona e iniciar la Champions con victoria frente al Newcastle.
Con el seleccionador inglés Thomas Tuchel observando desde la grada , Rashford firmó una actuación que recordó a su mejor versión y justificó su última llamada con Inglaterra. Primero, con un giro de cuello perfecto en el área para rematar de cabeza un centro de Koundé. Después, con un trallazo desde la frontal que se coló por toda la escuadra. Se reivindica Marcus tras años irregulares en el Manchester United .
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