La idea de un hogar inteligente que funciona al tronar los dedos ha sido la misión de muchas compañías. Si bien el internet de las cosas representó un paso fundamental de esta estrategia, los usuarios ya se han dado cuenta de que tener dispositivos conectados no es la mejor alternativa . Tal es el caso de Samsung, que decidió insertar anuncios en las pantallas de sus frigoríficos más costosos.
La historia de anuncios en electrodomésticos no es nueva. De hecho, Samsung, LG y otras compañías no dejan de experimentar con formas originales de joderte la vida con publicidad. Algunas —como Roku— han ido más lejos e intentan inyectar anuncios de un modo que parecería imposible bloquearlos , lo cual ha abierto el debate sobre la verdadera importancia de un dispositivo "inteligente".
El caso