Desde hace tres años, Don Carmen Broca, productor de cacao y chocolate , en Cunduacán, Tabasco , ha luchado con un enemigo milimétrico que amenaza sus cosechas: la cochinilla rosada , un insecto algodonoso de no más de 3 milímetros.

El productor da la batalla con lo que puede y tiene: las prácticas ancestrales de los repelentes e insecticidas biológicos, como el caldo hecho con ceniza y jabón, y las podas. En 2019, el gobierno federal paró la campaña contra esta plaga por austeridad.

En Tabasco , donde se produce más de 60% de todo el cacao en México , la cochinilla rosada ( ), una amenaza invisible a los ojos del consumidor, está frenando la capacidad del país para aprovechar el momento histórico del cacao.

A falta del apoyo de las instituciones, Don Carmen, de 60 años y t

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