El líder de Morena en el Senado, el tabasqueño Adán Augusto López Hernández, vive en la creencia de que los mexicanos nos chupamos el dedo. O sea, ¿el expresidente López Obrador sabía de las fechorías de Hernán Bermúdez Requena como secretario de Seguridad Pública en Tabasco, a grado tal que solicitó su destitución, pero el inocente de Adancito no sabía nada de nada? ¡Por favor!
Pero como la mentira tiene las patas cortas, ya va siendo hora de que el exgobernador tabasqueño y también exsecretario de Gobernación salga a dar la cara con respecto a sus vínculos con el líder de La Barredora porque, como lo señaló la presidenta Sheinbaum desde su conferencia Mañanera del jueves, es muy importante que se dé a conocer la información sobre el caso y cómo fue que el exfuncionario estatal “se fue d